LA OTRA HABITACIÓN
Escribo desde la soledad del pos cáncer, ya no tengo cáncer pero me siento física, mental y emocionalmente peor que cuando lo tenía. Escribo desde la normalidad que se le atribuye a los efectos de la medicina y desde la indiferencia que existe al respecto. Escribo desde ese sótano mental al que ésta medicina me ha enviado, donde la distancia entre las ordenes de mi cerebro y la respuesta automática de mi cuerpo ha perdido velocidad y me hace torpe. Escribo desde ese nudo mental que tengo que desenmarañar cada instante para poderme comunicar y realizar las tareas diarias. Escribo desde un lugar desconocido dentro de mí, una suerte de limbo mental que ha despertado todos los temores imaginados e inimaginados y que me hace desconfiar de lo que mis propios sentidos me muestran, donde lo que creo ver resulta no ser real. Escribo desde la oscuridad que me circunda, suplicando por ayuda para salir de éste mundo de sombras en el que me siento confinada. Sé que la única salida es aban