EN RECESO

 Agarrar el sol con las manos, se refiere a  un acto de arrogancia que no nos permite reconocer nuestra propia ignorancia. Tengo mi sistema de creencias en una especie de receso. Me doy cuenta que cada pensamiento, situación o persona evaluada, es puesta en la balanza entre mi sistema básico de creencias (es decir lo conocido, bien sea desde mi experiencia o desde un aspecto teórico que me agrada o me conviene) y mi realidad actual.

En éste momento mis creencias pesan, se han ido desarticulando lentamente hasta quedar poco de ellas y por ende, la que creí ser, no existe. Me aterra sujetarme de nuevo a alguna de esas creencias que fortalecí a través del tiempo en aras de mi supervivencia, porque temo que contengan poco de verdad o peor aún que no sean funcionales para mi actual experiencia.

Pero pararse con la mente en blanco frente a retos de salud, es desgarrador, es admitir que no sé nada y que lo que tengo por aprender podría ser igual de inválido como lo que sabía hasta ahora. Limpiarse de creencias, significa tener la despensa de  la mente vacía y no estar segura de querer volver a equiparla. La ignorancia se tiende ante mis ojos como la única posibilidad de sobrevivir a éste momento de mi vida en que la noche oscura de mi alma está en la cúspide de mi existencia y solo es iluminada con mi prodigiosa resiliencia.

IN RECESS

Grabbing the sun with our hands refers to an act of arrogance that does not allow us to recognize our own ignorance.  I have my belief system in a sort of recess.  I realize that each thought, each situation or person evaluated is placed in the balance between my basic belief system (that is, what is known, either from my experience or from a theoretical aspect that pleases or suits me) and my current reality. .

 At this moment my beliefs weigh heavily, they have slowly been dismantled until little of them remains and therefore, the one I thought I was, does not exist.  I am terrified of holding myself back to any of those beliefs that I strengthened over time for the sake of my survival, because I fear that they contain little truth or, worse yet, that they are not functional for my current experience. 

 But standing with a blank mind in the face of health challenges is heartbreaking, it is admitting that I know nothing and that what I have to learn could be just as invalid as what I knew until now.  Cleansing yourself of beliefs means having the pantry of your mind empty and not being sure if you want to restock it.  Ignorance lies in my eyes as the only possibility of surviving this moment in my life when the dark night of my soul is at the peak of my existence and is only illuminated with my prodigious resilience.