TE MOLAN ÉSTAS TETAS?

Fue la pregunta que me hizo mi amiga a quien le harán una mastectomia bilateral y debe decidir si se hará reconstrucción de senos o si pasa de largo por la necesidad de tenerlos otra vez. La pregunta que iba acompañada de una imagen de una mujer de talla máxima de brasier me dejó sumida en profunda reflexión sobre esa zona del cuerpo femenino. 

Los senos son un diferenciador de género, son la parte más visible de nuestro cuerpo que anuncia que somos mujeres. Su función principal ( al menos para mí) es proporcionar alimento a nuestros hijos, ser la primera fuente nutricia que ellos encuentren al llegar a éste mundo. Al margen de eso sirven para lucir un escote, y la apreciación de ese escote usualmente está sexualizada, el escote es para el sexo opuesto lo mismo que la entrada de una comida, promete de alguna forma de que proporciones será el festín. 

También sirven para ser usados en el preludio sexual, algo que los tipos casi no practican. Lo cuál es de alguna manera perfecto porque si los hombres se estacionaran más tiempo en las estimulación de nuestros senos, muchas mujeres podríamos prescindir de la penetración, así de importantes son para nosotras y así de ignorados a la vez están por nosotras mismas, pues los ponemos más al servicio visual de ellos que al servicio de nuestra propia satisfacción sexual.

Los senos son más un adorno con el que el tipo presume a su pechugona de turno, y con más frecuencia de la que quisiéramos, comparten el mismo anonimato que el clitoris.

Los senos también son símbolo de poder para algunas mujeres, pero el poder cada una lo tiene en diferentes partes, algunas en el cabello y otras en los glúteos, piernas o abdomen, las más aburridas, reconocemos nuestro poder en el plexo solar, desde ahí nos empoderamos y lideramos nuestras conquistas. 

En éste orden de ideas tendríamos que evaluar la simbologia que tiene para cada una las tetas y sobre todo el uso que se les quiera dar. Entonces sabremos que tanto nos molan las tetas. Y a usted le molan las tetas?