¿SIN PEZONES HAY PARAÍSO?
Mi suerte está echada, en dos días tendré la cirugía, una mastectomía unilateral, gracias a que el examen genético salió negativo. En el hospital entregaron un folleto sobre todo el procedimiento, que yo leí por completo. Estoy muy agradecida por la buena comunicación que tengo con el equipo médico que me acompaña, cada pregunta y cada duda la anoto en un cuaderno donde tengo documentado cada paso que doy hacia mi recuperación.
Por eso sé que al perder todo el seno también perderé el pezón, y por ende la sensibilidad en ese seno, incluso si hay reconstrucción. Me di cuenta, por reacciones de personas, que se lamenta la pérdida del seno, mas como instrumento de placer para ellos, que para nosotras mismas, asi de condicionadas estamos a dar placer. La mastectomia es vista como una amputación del atractivo sexual, poco se tiene en cuenta nuestra pérdida física, y como de verdad nos afecta al margen de la connotación sexual que se le atribuye a los pechos. Por eso, es importante desglosar el rol que ocupamos en la sociedad como mujeres, para determinar donde reside el dolor de ésta pérdida.
Me pregunté si necesito esa sensibilidad, en mi caso la respuesta es un NO rotundo, la verdad es que la participación de los hombres en la estimulación de los senos es tan pobre que no amerita aferrarse a esa sensibilidad. La queja es generalizada, desde que tengo memoria, féminas de todas las edades lamentan que, una penosa mayoría de hombres suelen tener la misma prisa que padecen en su vida cotidiana, durante la faena, ellos están más apurados por llegar a la meta, es decir su orgasmo, que no suelen disfrutar mucho del camino que los conduce a esa meta. En éste orden de ideas diré lo que dijo el tuerto, para lo que hay que gozar con un solo pezón basta.
Gracias a que descubrí que los hombres disfrutan menos del preludio sexual que nosotras, me dediqué a explorar con más libertad el mercado masculino y he podido encontrar raros y escasos exponentes juguetones y excelentes amantes. Es por ésto que inspirada en esa tendencia que tengo a capitalizar la adversidad, pienso que la ausencia de pezón podría incentivarlos a darle más atención al clitoris, también me deja llena de posibilidades para explorar otras zonas de mi cuerpo que seguramente son tan erógenas como los pezones, pero que han pasado desapercibidas por tener mi atención donde se supone que debería tenerla. Nuevas experiencias me esperan, y espero que mejores amantes también.
Pero lo mejor si será no ser juzgada porque mis pezones se vean a través de la ropa, será divertido ver la expresión de la gente cuando vean un solo pezón sobresalir mientras el otro brilla por su ausencia, lo importante es que brille después de todo.
REQUIEM POR UN PEZÓN
Un día florecieron mis pechos, dos botones engalanaron la cima de mis dos montañas
Se ruborizaban y se hinchaban cuando caían en manos de un buen jardinero
De esos dos botones me brotó leche, Miel, elixir de la vida.
Presenciaron el cuidado de algunos jardineros y el descuido de muchos de ellos
No era porque las montañas no fueran suficientemente altas,
algunos no gozaban del talento "muga"
pasaban desapercibidos por la magia de hacer florecer un par de botones que cambiaban de color y textura al fulgor de un orgasmo.
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