COMO SER UN BUEN AMANTE


Dicen las estadísticas populares que las mujeres disfrutamos más que los hombres de confesarle a alguien (en lo posible a una amiga) que tenemos un amante o una relación ilícita, aparentemente para alimentar el  ego, ante el deterioro que sufre después de que nuestro cuerpo ha sido poseído por otros postores, o ha sido habitado por un bebé durante un embarazo, con lo que la capacidad de poder atraer un nuevo macho a nuestras fauces se convierte casi que en todo un reto, en donde no contentas con saborear el banquete tenemos que hacerle saber por lo menos a alguien que ese banquete está a nuestro alcance. Los hombres en cambio sólo ostentan su amante si es digna de la envidia de los demás felinos de la selva masculina, mientras nosotras hasta al menos agraciado lo ostentamos con orgullo aunque sea adornándolo con el calificativo de excelente amante, porque todos los amantes son los mejores hasta que aparece uno nuevo (salvo contadas excepciones)

Ya sé que el tema es caliente, no hay guantes sociales con que agarrarlo, pero es una realidad que la ‘infidelidad” está cada día más generalizada y está ganando simpatía, aunque soy de las que cree que esto siempre ha sido así, lo que pasa es que antes las mujeres tenían más temor de ser descubiertas que ahora, por lo que el tema es relativamente de actualidad. Con los hombres ha venido pasando lo contrario, ellos están mutando de  perros a monógamos, al menos de palabra, porque aparentemente pactan cada día más con la fidelidad aunque a la hora de demostrarlo se vean en apuros. Pero ¿Que buscan ellos en una relación ilícita? Y ¿Que buscan ellas? Se cree que ellos buscan la diversidad de cuerpos exquisitos ante la rutina visual en casa, además su instinto cazador tiene que mantenerse vigente ya que contribuye a mejorar su auto valía. Y que ellas buscan las mariposas en el estómago y el romanticismo que se ha marchitado con el paso de los días a manos de la rutina.
 
 

Dado que con frecuencia escucho confesiones de mujeres con historias graciosas, dramáticas, insólitas, misteriosas y conflictivas respecto a su lucha interna con la moral y las buenas costumbres; y por ende respecto a la  mala relación que sostienen más que con el esposo con la fidelidad, decidí escribir una especie de manual para tener amante, ya que aparentemente es algo que muchos quieren hacer, eso si en el anonimato, algo que considero es todo un arte que no todo el mundo domina, y aunque sé que más de uno debe estar abriendo los ojos porque yo esté hablando de un tema tan censurable, lo estoy abordando porque es de la vida real, más común de lo que imaginamos y dado que no hay manera de evitarlo, porque la sociedad está entrenada para la monogamia, lo que incita cada vez más a las personas a las relaciones ilícitas, alguien debe ocuparse de cuando menos compartir algunas reglas de oro en aras de ser un buen amante.

 

1-La regla número uno es no enamorarse, en una relación ilícita el que se enamora pierde, de hecho dicen por ahí que un buen amante jamás se enamora.

2-No pida más tiempo del que se le concede, ni invada el tiempo de la otra persona de manera virtual o física.

3- Tengan sexo en territorio neutral, usar las zonas de confort de ambos es un riesgo innecesario que puede traer consecuencias funestas.

4- No guarde recuerdos de su relación ilícita, todo, absolutamente todo lo que usen debe ser desechable, sobre todo el sentimiento.

5- Toda comunicación escrita debe ser usada solo por estricta emergencia y debe ser borrada de inmediato, so pena de convertirse en algo que alguien puede usar en su contra.

6- Dicen que en el caso de las mujeres que están en relaciones ilícitas el riesgo de quedar embarazadas es del 60%, porque inconscientemente una mujer siempre quiere retener al macho, sin importar si tiene pareja, es instintivo, así que extreme las medidas de seguridad al respecto.

7-No deje huellas de su presencia en ninguna parte, déjele eso a las telenovelas

8-Comprenda que un (a) amante es sólo un postre no pretenda convertirlo en el plato principal.

9- Las mujeres tienen que estar conscientes que cuando un hombre es amante, dice estar enamorado y tiende a satisfacer la necesidad de drama de la mujer en aras de asegurar la presa el tiempo que le convenga, así que no caigan en el juego del amante enamorado, ese es el recurso más desechable que ellos usan porque piensan que obtienen mejores resultados.

10- Hay que estar consciente que la necesidad de tener amante usualmente es más hormonal que afectiva, y que por lo tanto es temporal.

11- No use a su amante para llenar vacíos emocionales, ser un (a) buen(a) amante implica estar lleno de uno mismo y no necesitar emocionalmente nada del otro.

12- La gente hambrienta hace malas compras, nunca se busque un amante cuando esté muy necesitado (a), porque su elección no será la mejor.

13- Pase sólo el tiempo estrictamente necesario en términos sexo-sensuales con su amante, la familiaridad apaga la pasión.

14-Y la última regla de oro, no convierta a su amante en una pareja, ese día se le acabará la magia.

Si todas estas reglas le parecen muy complejas de seguir, algo que es obvio por el consumo de tiempo y energía vital que implican, opte por la mejor recomendación que le puedo dar, no tenga relaciones ilícitas, declárese incompetente para ser fiel y anúncielo a su pareja, lo peor que le puede pasar es que su pareja no quiera estar con usted, algo que de todas maneras sucederá cuando se entere que anda en relaciones ilícitas.


Comentarios

Entradas populares de este blog

LA SEXIGENARIA

HADA DE LAS ALAS ROTAS.

LA RESURRECCIÓN DE COQUITO