DE LA LISTA DE CONTACTOS.
En facebook uno tiene más fácil acceso a la panorámica de la
amistad que en la vida real, uno sabe en poco tiempo quien es quien, incluso
mejor que cuando creía que los conocía personalmente, facebook mueve altas y
bajas pasiones, remueve odios y rencores, reúne a los antiguos enemigos y deja
en evidencia nuestra capacidad de perdón, también reúne a los mejores amigos que
se perdieron de vista mientras buscaban asegurarse un lugar en el mundo, para
descubrir que su vínculo fue producto de la inmadurez y que ahora no tienen
nada que hacer juntos, porque sólo los unió la escasez de posibilidades de
socializar de aquel entonces cuando no teníamos una gama tan variada y un menú
tan internacional de amigos de donde escoger.
Reúne a su pesar a los ex enamorados, con sus consabidas deudas hormonales, las mariposas saltando en el estómago y ese gusanillo perforándonos el chakra básico, lo cual ha generado infidelidades, retrocesos emocionales y algún drama sentimental ocasional producido por triángulos y cuadrados sentimentales que le hacen la vida más excitante a sus partes.
Reúne a los familiares que no simpatizaron nunca y que ante el éxito de alguno de ellos, automáticamente se convierte en el blanco de los afectos familiares a quien todo el mundo de repente quiere hacerle atenciones.
Y reúne a los ex jefes y ex empleados con sus respectivos trapitos al sol y repertorio de secretos laborales que se vieron en la obligación de guardar muy a su pesar, en orden de conservar sus empleos y que ahora pueden ventilar con tranquilidad " ella se acostaba con los empleados y los amenazaba con despedirlos si no la satisfacían" cosas así y peores escucha uno de estas reuniones que considero son las más molestas e inevitables que se dan en Facebook, porque los secretos laborales a menudo son más delicados que los conyugales.
Yo me he encontrado con todos, algunos de mi pasado que no han querido retomar el contacto porque "yo les caía mal" y se tuvieron que tragar su malestar por algún beneficio adicional que les reportaba tenerme en su círculo social. Están también los que ya no quieren saber de mí, porque algún amigo en común, me sacó de su llavero, estos son los enemigos heredados que carecen de libertad de elección porque tienen vida social comunal y se mueven como los parásitos, en manada, de estómago en estómago. Están los que aún dicen que me estiman, pero que no me quieren en su lista de contactos porque pertenecen a alguna religión cuyas filosofías son más estrechas que mi mente, y no seré yo con esta mente tan prostituida, quien los haga quedar mal con su pastor apareciendo en su facebook.
Y están los que me adoran, me admiran, me leen, pero me tienen que borrar y bloquear de su facebook por fuerza mayor, entiéndase esa fuerza como el mayor de la policía que tienen por pareja, que se siente vulnerado (a) con mi cercanía y que los condena a la furtividad amistosa de por vida.
Esta es la vida social que vivimos actualmente, no tener facebook es casi el equivalente a no tener un número de identificación, al punto que muchos resistentes a esta red, están optando por rendirse ante esa realidad y abrir un perfil en aras de encajar en el nuevo modelo de interacción social, que es del que se discute abiertamente en las conversaciones personales, porque es que los temas de conversación presencial giran en un significativo porcentaje en torno a las aventuras y anécdotas que le suceden a uno en facebook, por lo tanto quien no tiene facebook podría quedar aislado de una conversación en un momento determinado.
Para la muestra siéntese al lado de alguien que no tiene idea de como funciona facebook y empiece por decirle algo así como: éramos amigos por facebook, entonces le hice tag en una foto y él se molesto, porque antes yo ni siquiera le había enviado un poke, así que como era posible que lo tagiara en una foto donde el ni siquiera aparece, y él no quería que le apareciera eso en su feed, pero como no sabía como bloquear las aplicaciones porque no tenia idea como manejar los settings de seguridad, pues le tocaba verlos". No me digan que no sería muy duro para alguien tratar de ubicarse en una conversación donde hay terminología que no se maneja. Así que si usted querido lector no tiene cuenta en facebook, no espere a que pase más tiempo y haya más términos por aprender. O lo que lo hace peor, a que para poder abrir cuenta en facebook usted tenga que tomar un curso de un año y pagar por él, para poderlo usar, porque de que vamos para allá, vamos.
Comentarios